¿Camorrero a presidencia de Ositran?

Por: Herbert Mujica Rojas

Unos de los más firmes pretendientes a la presidencia de Ositran y gracias al controvertido y cuestionado proceso de selección para esta reguladora, es el marino José Alfonso Maratuech Pinzás y de quien hay testimonios que es un buen camorrero y usa los puños como argumentos decisivos, convincentes y de calidad total.

Según nuestras fuentes de la Autoridad Portuaria Nacional, APN, donde Maratuech se desempeña como Director de Operaciones y Medio Ambiente, hace cosa de dos o tres meses el marino se lió a golpes con el Jefe de la Unidad de Protección y Seguridad, otro marino, Juan Pozo Vivanco. Lo peor es que esto ocurrió dentro de las oficinas institucionales y delante del Gerente General, Gerardo Pérez Delgado, también marino, quien solamente atinó a suspender a ambos ¡por tres días!, cuando lo que correspondía era su destitución por el pésimo ejemplo que dieron y por el irrespeto hacia su institución. Entonces, ¿está este personaje capacitado emocionalmente para dirigir una entidad de la importancia de OSITRAN?

No sólo eso. Maratuech Pinzás es catedrático en la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas, UPC. Y este centro académico es el contratado para elaborar la prueba escrita para esta convocatoria de los reguladores OSITRAN y OSIPTEL.

Por los datos que se van conociendo se puede avizorar cuál va a ser el resultado del devaluado proceso de selección para presidente del organismo regulador OSITRAN. Y decimos devaluado, porque además de sus propias irregularidades, para esta segunda convocatoria se rebajaron sustancialmente los requisitos de la primera, en la que sí se eligieron a los presidentes de OSINERGMIN y de SUNASS; con lo cual, los que salgan de este certamen serán “Presidente de Segundo Nivel”, cuando lo lógico, como ocurre en todo proceso, es mantener las condiciones confiando en nuevos o los mismos postulantes. Es más, así lo viene haciendo la PCM en el concurso para seleccionar a los Vocales del Tribunal de Contrataciones del Estado, que va por su tercera convocatoria (ver página web de PCM). Entonces ¿por qué proceder de distinta manera en este caso? ¿es acaso alguna última trampa de alguien que está próximo a abandonar el gabinete o, en general, su cercanía con el poder?

Como decíamos el jueves pasado en ¿Concursos públicos decentes en Perú? http://www.voltairenet.org/Concurso... la terna que pasará por la entrevista, seleccionada por la comisión que incumple su propio reglamento, al dejar de lado candidatos que indudablemente deben haber alcanzado la ínfima calificación de 14, ante una prueba sin mayor dificultad para los currículos de los competidores, está integrada por: Hugo Suero Ludeña, sobre quien existe abundante información de su paso negativo por la Gerencia General del Poder Judicial y que fuera destituido de su cargo en enero del año pasado. Entonces este personaje solamente haría de relleno en ese grupo, pues el gobierno no se arriesgaría a nombrarlo para tan importante responsabilidad.

Sigue en carrera igualmente Humberto Ramírez Trucios, actual Secretario de Actas del Consejo Directivo del propio regulador y por lo tanto, hombre de confianza del cuestionado ex presidente Juan Carlos Zevallos Ugarte, de infausto paso por OSITRAN (¡que pregunten a tanto funcionario de experiencia, despedido por no coincidir con sus “ideas”!); más aún, lo acompaña desde que éste ocupara los cargos de viceministro de Agricultura y del Interior durante el toledismo. Es decir, si recordamos las palabras del primer ministro a propósito del anterior concurso y lo ocurrido respecto a ello, Ramírez estaría descartado por significar el continuismo de la gestión que culminó en febrero pasado.

Queda entonces, José Maratuech Pinzás, como único candidato aparentemente asequible para regir los destinos del regulador por los próximos cinco años. Y como dijimos líneas antes el ex marino es también catedrático de la maestría de Gerencia Pública en la UPC, justamente la universidad contratada para realizar la cuestionada prueba escrita, única para cargos de la misma importancia en el país. Es decir las fortuitas circunstancias son polémicas por decir lo menos ¿no?

¿Es también coincidencia que ya habiendo pedido la Comisión que el ensayo de la primera convocatoria versara sobre puertos, en esta segunda convocatoria se pida otro tema también de puertos y que el favorito sea marino y funcionario de la Autoridad Portuaria Nacional? ¿No controla más infraestructuras OSITRAN? ¿Son menos importantes las carreteras, los aeropuertos, los ferrocarriles y por último el tren eléctrico?

¿Es pura casualidad que sea su centro laboral el que prepare y califique la cuestionada prueba escrita, que increíblemente no arroja cinco resultados mayores de 14, entre 10 participantes que ya pasaron una rigurosa evaluación curricular?

Si la primera convocatoria se declaró Desierta sin conocerse las causas de dicha equivocada decisión, pues los finalistas fueron dos Directores con poco tiempo en el cargo, por lo tanto no vinculables con la gestión que aparentemente terminó, pero que sigue moviendo los hilos del regulador, pues todos los demás funcionarios están ahí. Con mucha mayor razón debiera desecharse el trabajo de esta Comisión que ha demostrado ser incapaz de hacer bien su labor, cuando ni siquiera cumple el reglamento que la obliga.

Que recapacite el gobierno y se decida por gente proba, capacitada y preparada en todo aspecto para tan importante cartera, habida cuenta que tendrá que hacer frente a presiones de importantes grupos de poder que manejan las concesiones y las supervisiones.

¡Que anule el concurso!

Ya veremos qué resulta de la investigación en marcha de los finalistas del OSIPTEL.